Las palabras son ropa y cuando cambias de país ya no las necesitas. Por eso los animales intercambian su sensibilidad, su energía y todo lo que traduce lo universal en ellos.
¿Cómo estás?
¿En qué puedo ayudarte?
¿Por qué actúas así?
¿Qué necesitas?
Estas y otras preguntas te rondan por la cabeza… vamos a formularlas directamente a tu animal.
¿Qué es la comunicación animal?
Reconectar con la esencia y el estado de presencia nos permite volver a un nivel sumergido, olvidado pero aún presente de nosotros mismos: la comunicación de corazón a corazón.
Quien ha tenido la suerte de tener un amigo animal, ha tenido a menudo la sensación de haberlo comprendido y «sentido» profundamente, hasta el punto de decir: «¡Sólo le falta la palabra!».
En cambio, esta ausencia de comunicación verbal nos lleva a una conexión profunda, de corazón a corazón, auténtica, transparente y pura.
Mi misión es hacer de «intérprete» entre tú y tu animal. Entrando en el espacio sagrado de la comunicación, nos abrimos a recibir y transmitir estados de ánimo, emociones, imágenes para que la relación fluya, aclarando necesidades y facilitando una convivencia armoniosa y respetuosa para todos.
Principios éticos
- La comunicación o la terapia sólo se llevarán a cabo si el objetivo final es el bienestar del animal y si lo solicita por escrito el responsable del animal.
- La comunicación no se utilizará para cambiar la personalidad del animal o para imponerse a su voluntad
- Se respetará su derecho a no querer responder a las preguntas formuladas.
- Todas las comunicaciones son confidenciales
- La comunicación no puede sustituir a una visita de un veterinario
¿Cómo funciona?
La comunicación puede tener lugar en persona o a distancia.
Solicita una cita a través del formulario de contacto y definiremos los términos de la consulta.
A partir de ahí, estaré encantada de actuar como intérprete entre usted y su animal, de forma acorde con mis principios éticos.